Villa de la Purísima Concepción de Celaya, Guanajuato. Cabeza número 6.

Llegamos a Celaya con un recuerdo borroso, pues como soy de Salamanca, en más de una docena de ocasiones había pasado por este lugar, recuerdo que había una nieve exquisita por el rumbo de El Carmen. Y recordaba con una evidente mala memoria que a la entrada, precisamente frente a la refresquera y el Molino, en la glorieta se levantaba la estela de la Cabeza de Águila, así que caminando prácticamente todo el Boulevard López Mateos, pregunte a cuanto mortal encontré que pintara arriba de cuarenta años si sabía el paradero del monumento.

Una señora, coetánea mía, aseguró que allí donde también yo aseguraba, había visto la Cabeza de Águila, luego vino todo un discurso, de esos que ya nos sabemos de memoria en contra del Gobierno y su desatención a ciertas cosas. Hubo quien me dijo que si recordaba el monumento pero que no sabía en donde estaba. El chofer de un autobús me mandó hasta una nueva glorieta ubicada en la salida a San Miguel Allende, otro me dijo que seguramente por el Puente de Tresguerras, en fin, fueron muchas las versiones. Decidí averiguarlo en la hemeroteca de El Sol del Bajío y fue allí que di con estas dos fotografías. En la primera vemos cuado estaban terminando la estela para colocar allí la Cabeza de Águila, en la otra, cuando estaban terminando la balaustrada del monumento a Hidalgo que con motivo del Sesquicentenario se le levantó.

Finalmente llegué al Templo de San Antonio, “en las goteras de la ciudad”, como se decía antes a las entradas de las poblaciones. En este caso a la que se ubica en el norte. Allí se registra el momento histórico cuando don Miguel Hidalgo llega a la ciudad y coloca en el sitio que vemos en la fotografía el estandarte con la Virgen de Guadalupe, declarada ya generala del ejército Insurgente.

Desconozco cuando habrá sido levantado el monumento, seguramente para conmemorar el Centenario de la Consumación, es decir, el 21 de Septiembre de 1921, o tal vez fue durante las fiestas del Centenario, cuando se inauguró la muy famosa Bola del Agua.

Este es el monumento completo, casi desconocido, al menos, en lo personal, nunca había oído hablar de él. Si observas con atención verás un rectángulo verde oscuro, era allí donde se encontraba la Cabeza de Águila, misma que, una vez fue víctima de un choque, la cabeza quedó deshecha y nunca más se volvió a poner, a pesar de que Celaya fue un lugar crucial en la ruta que don Miguel Hidalgo hizo hace ya 200 años.

“La muchedumbre o ya ejército llegó a Celaya el día 20 de septiembre, acamparon la noche anterior en los terrenos de la Hacienda de Santa Rita. Debido a una crecida de los ríos circundantes, el padre Hidalgo no pudo pasar a la ciudad hasta el día siguiente”. (1)

Celaya no cuenta en la actualidad con una Cabeza de Águila, de las diseñadas por Chávez Morado, pero tiene algo mejor aún. El primer monumento levantado a la Independencia Nacional, la columna que originalmente Tresguerras diseñó para poner a Carlos IV, pero, dadas las circunstancias y consumada ya la Independencia, se rindió honor a los participantes en la gesta libertadora. Contiene todos los elementos propios del Primer Imperio, el cañón, la bandera y demás simbolismos que enaltecían en esa época al amor por la Patria. Al fondo vemos la torre del templo de San Francisco, actual Catedral de Celaya, construida también por el más grande de los celayenses, Francisco Eduardo Tresguerras.

Fotografía tomada el 25 de enero de 2010.

La “historia oficial” ha olvidado a recordarnos varios personajes, uno de ellos es Ignacio Camargo, de él leemos que “al entrar el ejército Insurgente a Celaya, el señor D. Ignacio Camargo ya ostenta el título de Teniente Coronel, En el libro del señor Abad Arteaga dice lo siguiente. “… al día siguiente se dedicaron a la organización de las fuerzas militares con que hasta entonces se contaba, empezando desde el nombramiento de Cabos, Sargentos, Tenientes y Coroneles efectivos, dándole preferencia a los antiguos soldados del regimiento de la Reina y los cargos de Coroneles, Brigadieres y Capitanes de Tenientes, os repartió entre los dueños de haciendas y ranchos. El jueves 20 de septiembre de 1810, Hidalgo y Allende, ambos montados en sus caballos y con sus trajes ordinarios, o sea el de Cura y del de Capitán de la Reina respectivamente, dieron órdenes a la tropa, para proseguir su marcha”. (2)

Doña Abigail Carreño de Maldonado, periodista celayense nos reafirma eso que veíamos ayer sobre las inundaciones: “Vadeando las ciénegas entra por el rumbo de la hoy calle de Insurgentes y en las afueras del templo de San Antonio, con el estandarte de la Virgen de Guadalupe en su mano, el cura don Miguel Hidalgo y Costilla, teniendo a su lado a sus más cercanos colaboradores, Allende y Aldama, observa su “tropa” con la que hará su entrada triunfal a Celaya”. (3)

Lo que vemos en la foto es la Posada de Guadalupe, lugar en donde se hospedó el cura Hidalgo. En la actualidad la tienda Woolworth es la que ocupa el lugar, lo triste que vemos es que la placa que fue colocada hace ya un siglo y que recuerda el paso del padre de la patria por Celaya está prácticamente escondida detrás de un anuncio de Telcel. De la Cabeza de Águila, ni que decir, de ella no queda ni siquiera el recuerdo.

¿Qué pasó mis Celayenses?

Fotografía tomada ayer, 13 de mayo 2010.

Fuentes:

1.- El Sol del Bajío. Suplemento especial. Celaya, 30 de Agosto, 2009.

2.- Carreño de Maldonado, Abigail. Imagen de Celaya. Impresos Gráficos del Río. Celaya, 2004.

3.- Ibid